La prestación por enfermedad es una prestación de la seguridad social que se otorga a los trabajadores que temporalmente se ven imposibilitados para realizar sus actividades laborales debido a una enfermedad o accidente.
En este artículo analizaremos en detalle cómo funciona la prestación por enfermedad, abarcando desde los requisitos para su concesión hasta los procedimientos para solicitarla y su seguimiento.
Requisitos para la concesión de la prestación por enfermedad
Para tener derecho a la prestación de enfermedad, el trabajador debe cumplir ciertos requisitos establecidos por la legislación de seguridad social.
En primer lugar, el asegurado debe estar cotizando periódicamente a la Seguridad Social, ya sea como empleado, contribuyente individual o asegurado facultativo.
Además, es necesario acreditar la incapacidad para el trabajo, ya sea mediante un reconocimiento médico realizado por el INSS (Instituto Nacional de la Seguridad Social) o mediante informes y certificados médicos.
La legislación también exige un período de gracia para la concesión de prestaciones de enfermedad, es decir, un número mínimo de cotizaciones mensuales al INSS.
Este plazo varía según la categoría del asegurado y la naturaleza de la enfermedad o accidente.
Procedimientos para solicitar la prestación por enfermedad
Para solicitar la prestación por enfermedad, el asegurado deberá programar un reconocimiento médico ante el INSS.
Esta cita se puede concertar a través de la web del INSS, la aplicación Meu INSS o llamando al 135.
El día del examen es importante llevar todos los documentos médicos que acrediten la incapacidad, como exámenes, informes y certificados.
Durante el reconocimiento médico, el perito evaluará el estado de salud del asegurado y verificará si realmente se encuentra incapacitado para trabajar.
Es importante destacar que la prestación por enfermedad no se concede automáticamente, siendo necesario acreditar la incapacidad.
Seguimiento y duración de la prestación por enfermedad
Después de conceder la prestación por enfermedad, el asegurado debe someterse a reevaluaciones periódicas para comprobar si todavía no puede trabajar.
El intervalo entre reevaluaciones varía según la gravedad de la enfermedad o accidente y las expectativas de recuperación.
Durante el período en que recibe la prestación de enfermedad, el asegurado tiene derecho a recibir una cantidad mensual correspondiente a un porcentaje de su salario cotizado.
Este porcentaje varía según la legislación vigente, pudiendo ser 91% del salario de cotización para la mayoría de asegurados, o 100% en casos de enfermedades graves o accidentes de trabajo.
Es importante mencionar que la prestación por enfermedad tiene una duración máxima establecida por ley.
Si el asegurado no se recupera dentro del plazo máximo de ausencia previsto, la prestación podrá convertirse en jubilación por invalidez, si la invalidez se considera permanente, o el asegurado podrá reincorporarse al trabajo si se recupera totalmente.
Recursos y revisiones de beneficios por enfermedad
Si el INSS deniega al asegurado su solicitud de prestación por enfermedad, tiene derecho a recurrir la decisión.
Para ello es necesario presentar recurso administrativo dentro del plazo establecido. El recurso será analizado por una sala de recursos del propio INSS, que reevaluará la situación del asegurado.
Además, es posible solicitar una revisión de la prestación de enfermedad si se produce un empeoramiento del estado de salud o un cambio en las circunstancias que justificaron la concesión de la prestación.
Para ello es necesario presentar nuevos documentos médicos que acrediten la necesidad de la revisión.
Conclusión
La prestación por enfermedad es una prestación fundamental para los trabajadores que se encuentran temporalmente incapacitados a causa de una enfermedad o accidente.
Para garantizar su beca, es necesario cumplir con los requisitos establecidos por la legislación de seguridad social, someterse a un peritaje médico del INSS y seguir los procedimientos correctos.
Además, es importante monitorear periódicamente el beneficio y estar al tanto de los recursos y revisiones disponibles si fuera necesario impugnar una decisión.